Hija primogénita de Aenor de Chatellerault y Guillermo X, duque de Aquitania, nació en Poitiers en 1122 o 1124 (no se ha podido corroborar la fecha exacta). Fue educada por su padre como si fuera un varón e instruida en el arte de leer y escribir, la caza, la cetrería y la estrategia militar. De su familia paterna heredó el gusto por los trovadores y la poesía caballeresca ya que a su abuelo Guillermo IX, se le atribuyen los primeros versos antiguos encontrados en el reino de Francia , escritos en la lengua de Oc.
Cuando Leonor contaba 13 o 15 años de edad fallece su padre y como su único hermano varón, Guillermo, había muerto prematuramente, se convierte en heredera del condado de Poitiers y del ducado de Gascuña y Aquitania, un vastísimo territorio que llegaba hasta los Pirineos. Su padre había dispuesto que sólo pudiera ser heredado por sus descendientes directos y nunca por sus maridos.
Ese mismo año se casa con Luis VII de Francia que contaba 16 años. Leonor se tropieza con una corte fría, austera y sin trovadores ni poesía e intenta llenar ese vacío con juglares que recoge y que son interpretados como una ofensa, aunque ella solo intenta copiar el ambiente de su casa, que había vivido desde pequeña.
De este modo comienza a fraguarse la leyenda negra que acompaña a la Duquesa de Aquitania durante toda su vida, convirtiéndola en uno de los personajes mas controvertidos de la Alta Edad Media.
Su matrimonio con Luis comienza a desmoronarse con ocasión de un enfrentamiento con el papa a causa de la boda de su hermana Petronila con Raúl de Vermandois, primo del rey y casado en ese momento con la sobrina de un conde poderoso que no tolera el desaire. Al final la duquesa y su marido consiguen que el papa acepte el matrimonio, tras un largo conflicto del que derivó una matanza.
Tras este episodio, Luis VII emprende camino hacia la Segunda Cruzada que tuvo lugar en 1144, tal vez para redimir sus pecados. Leonor le acompaña y participa en la contienda montada en su caballo como cualquier varón.
Terminada la guerra se dirigen a Antioquia, donde la duquesa es acusada, sin que nada se halla corroborado históricamente, de mantener relaciones con su tío, príncipe de la ciudad. Su marido muy contrariado la obliga a marchar con él a Jerusalén.
Los reyes habían tenido una hija y Leonor se queda de nuevo embarazada al regreso de Oriente. Nació otra niña lo que provocó una gran decepción en el rey que la repudia y logra la anulación (marzo de 1152), con la excusa de consanguinidad en cuarto grado.
Meses mas tarde al Duquesa contrae nuevo matrimonio con Enrique de Anjou, primero de la dinastía Plantagenet, dando origen al imperio Angevino, territorio que se extiende desde Escocia hasta los Pirineos y que suponía un desafío permanente al rey de Francia, anterior marido de Leonor. De esta unión nacieron ocho hijos entre ellos Ricardo Corazón de León y Juan Sin Tierra.
El matrimonio se rompe cuando Leonor descubre la infidelidad de su marido con Rosamunda de Clifford, no aceptando la reina ser la segunda en importancia. La duquesa de Aquitania se traslada a Poitiers junto a sus hijos. En 1170 Leonor insta a su marido a entregar Gascuña, Aquitania y Poitou a su hijo Ricardo y para salvaguardar su futuro y el de los otros hijos, contacta con su anterior marido el rey de Francia, para que apoye a éstos contra su padre. A cambio de Luis podría recuperar su primacía en el territorio europeo.
Fracasada la rebelión de tres de sus hijos contra el padre, es acusada de traición y encerrada por su marido el rey Enrique Plantagenet durante 15 años.
Muerto Enrique le sucede su hijo Ricardo quien libera a su madre y la nombra regente mientras el acude a la Tercera Cruzada.
Es su época de mayor libertad. Es ella quien elige personalmente a Berenguela de Navarra para esposa de Ricardo y ya con 80 a años viaja a España a la corte de Castilla, atravesando los Pirineos, para elegir entre sus nietas hijas de Leonor Plantagenet y Alfonso VIII de Castilla, la esposa idónea para el futuro rey de Francia Luis VIII.
Leonor, efigie tumbal |
Leonor de Aquitania fallece en la abadía de Fontevraud, no sabemos en que condiciones puesto que su muerte no esta mejor documentada que su nacimiento. Lo que si sabemos con certeza es que la abadía era el panteón oficial de los Plantagenet.
La duquesa de Aquitania fue una mujer atípica en el tiempo que le tocó vivir. Culta e instruida no fue comprendida por monjes y clérigos de la época quienes se encargaron de mostrar a una Leonor transgresora y malvada sin el mas mínimo rigor para tal afirmación. Basta decir que su mayor pecado, a los ojos de esta gente, consistía en ser “una mujer bella”( así la describen), lo que la convertía en sospechosa de cualquier acción, en particular contra los hombres, a los que seducía. Era la encarnación del mal, de ahí las calumnias que vertieron contra ella.
Asimismo los franceses la acusan de romper la unidad nacional con su ambición y los ingleses de haber sacado a los príncipes de Londres, haberles inducido a rebelarse contra su padre e inculcado el amor por Francia, antes que por Inglaterra. Otros muchos, sin embargo, la consideran la primera feminista de la Historia.
Ciertamente fue una mujer que vivió siempre como quiso y uno de los personajes mas interesantes, cultivados y decisivos de la Edad Media y también uno de mis favoritos de este periodo histórico.
Abadia de Fontevraud |
Bibl: J. Onieva, Antonio: Mujeres universales.
Reguilón Molina, Ana: Biografía de Leonor de Aquitania.
No hay comentarios:
Publicar un comentario